“La prohibición hizo al tráfico de marihuana más atractivo y rentable, alentó la criminalidad y la corrupción en todos los niveles… Dada esta situación, la polémica no puede reducirse a la guerra contra la marihuana o la permisividad. Hay que tomar por fin el toro por las astas: cómo puede implementarse la legalización. Para poner fin a la guerra inútil, perniciosa y egoísta que los países consumidores inflingen a los productores. El problema es una cuestión fundamental ética y política, que sólo puede definirse claramente mediante un acuerdo internacional, con Estados Unidos al frente.”
(Gabriel García Márquez – escritor).