Sensacional, magnífica y poderosa. Así podríamos definir la obra de Juan Travieso, un cubano que se centra en el impacto de la humanidad sobre los animales.
Este artista con sede en Miami y Nueva York explora nociones de impermanencia y decadencia a través de un lenguaje combinado del pop, el realismo y la abstracción.
Las figuras, ya sean seres humanos o animales, se dividen en espacios y se parecen mucho a los modelos 3D, hablando tanto de su temporalidad como de su transición a la era digital. En sus recientes exposiciones, Travieso transpone su obra sobre especies animales en peligro con obras relacionadas con su propia infancia y experiencias creciendo en Cuba. Lo que antes eran las abstracciones que interactuaban con animales desaparecidos, son ahora figuras de ideologías y culturas desaparecidas y transformadoras.