A medida que progresas en tu carrera como diseñador, tu enfoque cambia.
Los tipos de habilidades que tienes por desarrollar, los desafíos que tienes por resolver y cómo divides tu tiempo a lo largo del día, son cosas que deben evolucionar para concentrarse en temas concretos que nos ayudan a mejorar.
Me gustaría enmarcar las habilidades de un diseñador por capas. Es importante que estas se desarrollen capa por capa y en el orden correcto (aunque pueden haber excepciones) puesto que existen ciertos niveles de progresión en el desarrollo de habilidades y la experiencia de cada persona.
Etapa 1: Dominar las herramientas
El diseñador primero aprende a usar las herramientas necesarias para la producción de material gráfico. Se está volviendo competente en cada una de ellas, y define cuales serán las que le serán más útiles en los próximos años.
Indicador clave: Eficiencia. Cuanto más rápido, mejor. Se trata más de la velocidad que de la calidad del diseño.
Etapa 2: Aprender buenas prácticas
Luego de que el diseñador ha dominado las herramientas, entra en el periodo de aprender sobre buen diseño. Se ha familiarizado tanto con los patrones y principios del diseño que sabe exactamente cuál utilizar según la situación.
El diseñador navega en Internet, interactúa con aplicaciones, ve diseño EN TODO (identidad corporativa, posters, ediciones impresas de revistas y periódicos, empaques, etc) y su cerebro reconoce instantáneamente qué funciona y que se puede mejorar desde su perspectiva.
Indicador clave: Calidad. En este punto, el diseñador debe poder tomar decisiones sobre qué elementos gráficos usar y cómo conectarlos de una manera correcta.
Etapa 3: Formar un punto de vista
El diseñador ha visto tantas perspectivas y ha trabajado en tantos proyectos que ya se ha empezado a formar una opinión propia.
Ahora, puede articular sus puntos de vista y dar solución en torno a las necesidades de sus clientes y prospectos.
Indicador clave: Articulación. Al articular cuál es el problema, sus requisitos e implicaciones, puede desarrollar de una mejor manera la solución de diseño requerida.
Etapa 4: Contar una historia a través del diseño
El diseñador entiende la importancia de tomar decisiones de diseño coherentes. Puede definir modelos conceptuales, contar una historia convincente para presentar sus conceptos y sostener la idea hasta las etapas finales del diseño.
Indicador clave: Magia. Este es el punto en la carrera de un diseñador donde creará su trabajo más brillante: diseños que pueden provocar emoción, empatía y deleite, mientras siguen resolviendo las necesidades comerciales reales.
Etapa 5: Colaborar en múltiples niveles
El diseñador se ha vuelto tan bueno en su oficio, que ahora puede centrarse en otras áreas a nivel de la organización. Puede colaborar con otros departamentos, lo que le permite llevar su pensamiento y liderazgo a otro nivel.
Indicador clave: Colaboración. El diseñador se vuelve auto-suficiente y puede adaptar su estilo de colaboración a la perfección en diferentes disciplinas (horizontal) y en diferentes niveles (vertical).
Etapa 6: Establecer conexiones personales
El diseñador comienza a comprender las diversas fuerzas e influencias dentro de la organización y la forma correcta de navegar allí para obtener la ejecución de sus ideas. Comprende la importancia de la confianza y de establecer relaciones con las diferentes áreas de trabajo, formando vínculos con actores dentro y fuera de la compañía.
Indicador clave: Confianza. El diseñador se convierte en una figura confiable dentro y fuera de la empresa, y puede construir rápidamente credibilidad cuando se coloca en un contexto diferente (por ejemplo, una nueva reunión de negocios, un nuevo departamento, un nuevo proyecto).
Etapa 7: Hacer crecer el negocio
El diseñador tiene un impacto directo en el negocio de la organización. Maneja equipos más grandes, lidera proyectos más grandes y, lo que es más importante, genera crecimiento en múltiples áreas diferentes de la organización, más allá del “departamento de diseño”.
Indicador clave: Crecimiento. Puede traducirse en nuevos negocios, nuevos proyectos, crecimiento de equipos, más clientes, mas dinero. En última instancia, se trata de hacer que el negocio sea más fuerte y más grande.
Si crees que puedes saltarte lo niveles, estás equivocado. Cada uno de ellos está intrínsecamente conectado entre sí. Por lo que es necesario prepararse en cada uno para desarrollar el nivel siguiente.
No puedes ganarte la credibilidad de un cliente, si no has experimentado durante años operando herramientas, diseñando variedad de piezas, trabajando con equipos multidisciplinarios, investigando mejores prácticas y probando diferentes soluciones. Sólo el tiempo y el trabajo duro te ayudarán a escalar hasta la última etapa. ¡Disfruta el viaje!